Informacion General
Origen | Bogota - Colombia |
Estado |
Activo
(1998 - 2001) (2014 - Actualidad) |
Integrantes | Zullyneida Hidalgo - Voz Angelica Vanegas - Saxofon Juan Jose Ortiz - Trompeta Rafael Serrano - Bajo (QEPD) Orlando Parra - Guitarra Alberto Garcia - Piano Juan Carlos Montero - Batería |
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Un poco de historia
Cual jugada del destino o error en el sistema, a finales del siglo
pasado la fiebre capitalina por el blues sirvió para que algunos
personajes fueran contra la corriente, precisamente por no estar en
ella.
Fueron personajes que se adaptaron al desadaptado y desaforado
gusto que en Bogotá suelte tenerse por algo y en especial por la
música que no hace más que mancillar la mente y dejar la vida hecha
añicos. En últimas todo ese blues bogotano, todo ese lenguaje de la
perdición con guitarra, piano, bajo, armónica, gemidos y chillidos de
amor, dolor y una que otra cosa intermedia, se supo ajustar para unos
cuantos personajes y bandas. Colmaron la esencia, vivieron la agonía y
entre canciones, maldiciones y unas cuantas grabaciones nos hicieron
sentir que el gris que nos acompaña día a día con nuestra polución,
podría reverdecer para ser ese azul reproche por el cual el blues
vive.
Y alguien que ha chupado de eso es Rafael Serrano, un personaje que es
la carroña bella de la insistencia en la degradación por el blues y
aquellas maldiciones benévolas que la música logra conjurar. Cada
cierto tiempo, personajes de esta calaña y estirpe calan en la ciudad,
para habitar en ella, haciéndola invivible a punta de canciones. Lo de
él es carcomer el blues o relamerlo con ese asqueroso pero infaltable
deseo de tenerlo dentro del cuerpo y esperar a que encienda la mente,
la verga y la voz. Siendo así, no tiene porque sorprender que ese
enfermo agonizante de la ciudad, tenga aprecio por aquel que sabía que
la belleza evidente estaba en lo oscuro, lo mezquino, lo prohibido, lo
proscrito o hasta en eso que es tan bello como “el encuentro fortuito,
sobre una mesa de disección, de una máquina de coser y un paraguas”.
Siendo así, la semilla del regocijo macabro ya estaba sembrada por
Maldoror y fue Rafael Serrano quien se encargó de cuidarla con su obra
sonora publicada cuando se bordeaba el fatal destino del nuevo
milenio.
Esta banda duró una década entera golpeando la conciencia de la
ciudad; pervirtiendo mentes dispuestas a buscar la pureza y la belleza
que se fían en los colores diáfanos. Fue el culpable de hacer que su
banda estuviera seleccionada para levantar el ánimo de los condenados
malnacidos que ni las putas de Los Mártires o el barrio Santa Fé
reciben por lástima. Porque esta es una obra más dada a no estar
relacionada con algo conocido por estos lares, sino más preparada para
estar en el parnaso de la decadencia. Donde se juntan los
conspiradores que se dedican a gozar con los males y las
bienaventuranzas de una ciudad que dentro de sus agonías que capaz de
escribir con la misma B su nombre natural y su color de alma
siniestra: Bogotá y Blues.
Isidoro Ducasse dejó un libro, llamado Los Cantos de Maldoror. Isidore
Ducasse Jazz Blues Band, solo dejó este disco y unos cuantos
infortunios que aún inquietan la ciudad que aún espera la atención de
unos oídos que no se deben dejar acostumbrar a que le den todo para
escuchar. Lenguas lo suficientemente agrias para hacer que Chapinero,
Kennedy, el Centro, La Candelaria, Palermo y La Soledad sean los
lugares escogidos para que la perdición conviva en forma de sonidos
del Delta del Mississippi. (Fuente)
Reseña de la Enciclopedia
Hacia finales de los años 90
comenzo a gestarse un movimiento de blues colombiano, o especificamente
fue un movimiento que vio la luz en la ciudad de Bogota con agrupaciones
como Candelaria Blues, Blue Derek, Vertigo e Isidore Ducasse Jazz Blues
Band. Si bien en los inicios del rock colombiano hacia mediados de los
años 60, algunos grupos como The Time Machine o The Wallflower
Complexion harian sus propias interpretaciones de clasicos como Baby
Please Don't Go, Route 66 o Your Love Is Driftin'; solamente seria hasta
los 90 cuando emergieron estos grupos cuyo catalogo estaba
exclusivamente dedicado al blues y con composiciones propias.
Este
primer movimiento de blues colombiano desafortunadamente no fue
duradero, tal vez por un desconocimiento por el genero por parte de los
bogogtanos acostumbrados a otros gustos musicales....si fue dificil para
el rock emerger, como lo seria para el blues?. De esta ola quedaron
muchos toques en bares, algunos alcanzaron a presentarse en Rock al
Parque y en el mejor de los casos, dejaron algunos registros sonoros;
entre ellos el album "Cierra la Puerta" de Isidore Ducasse Jazz Blues
Band. Su sonido es un ensamble de poesia, blues y jazz, cuya voz
inconfundible de su vocalista nos recuerda a aquellas grandes vocalistas
femenimas del blues como Etta James o Aretha Franklin.
Hace
unos meses Isidore se reunio de nuevo despues de mas de 10 años de
estar alejados del medio musical, motivados probablemente por esta
segunda ola de blues colombiano que se ha presentado desde mediados de
2008 y que con el pasar de los años, viene creciendo permanentemente con
el nacimiento de un gran numero de artistas, que dia a dia salen de la
clandestinidad con su sonido blusero en busca de corazones afligidos. Y
lo mejor de todo es que no solo se gestan en Bogota, sino en otras
ciudades como Medellin, Armenia, Bucaramanga, Pasto, Cali, por nombrar
algunas.
Isidore Ducasse Jazz Blues Band esta de vuelta!!!!
Discografia
(De click sobre la caratula del album que desee descargar)
CIERRA LA PUERTA 1999 | |
1. Luna personal 2. Stride time 3. Blue Train Blues 4. Basin Street Blues 5. Ladrón 6. Maldoror 7. Blues del diablo 8. Walking by myself 9. Cierra la puerta 10. Un tren que regresa de la muerte 11. Perfecto blues 12. Toda la noche 13. Hay que dejarse crecer las uñas |
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